SALUD | OLGA VALLEJOS: NO HUBO EXPLICACIÓN NI COMUNICADO DE PORQUÉ ME DESPIDIERON

La enfermera Olga Vallejos era personal de la Sala de Primeros Auxilios en Colonia 2 de Abril, Mantilla. Recientemente, a través de sus redes sociales, hacía público su reclamo de que su contrato habría sido cesanteado desde la Municipalidad, “por no aceptar trabajar de moza y servir a los comensales en la fiesta del pueblo”.

En comunicación con Uno a la Tarde, la enfermera mencionó que en 24 años de brindarse al centro de salud, nunca antes la habían convocado para hacer ese servicio que no le correspondía. Además, expresó que “desde el primer momento en que comencé a trabajar, estuve disponible las 24 horas a la comunidad. Y la comunidad sabe, es testigo de que esto es así; estaba disponible a la hora que sea, como la salita está frente a mi casa, siempre atendía a cualquier paciente y no importaba la hora. Pero sin cobrar un peso de más, atendiéndolos en mi casa o incluso si me tenía que ir hasta sus domicilios también; corría todo por el mismo sueldo, no cobraba ningún adicional, ningún plus, solo por lo que me pagaban desde la municipalidad”.

En cuanto a cómo se anoticia del despido, Vallejos contó que “no hubo ninguna explicación ni comunicado oficial, nada; me entero porque en mi cuenta bancaria no habían depositado mi sueldo, que me correspondía por hacer mi trabajo. Entonces comencé a averiguar por medio del viceintendente, que es mi hermano, ahí en la municipalidad. Y es él, luego de hablar con el intendente, quien le dijo que yo ya estaba de baja y que no iba a continuar en mi trabajo, el que me hace saber. Esa fue la única explicación. Realicé, por supuesto, el reclamo correspondiente que todavía está sin respuesta. Así como también el de una Concejal, que presentó una nota en el Concejo Deliberante, pidiendo para que me reincorporen y tampoco hay noticia sobre eso”.

Nota presentada por la concejal Andrea E. Valenzuela ante el Concejo Deliberante, aun sin respuesta.

La enfermera dio cuenta, además, durante la comunicación; que la comunidad conoce de su idoneidad y que pueden dar cuenta de ello y que en casi un cuarto de siglo de servicio hacia ellos y a su profesión, fundamentalmente, siempre lo hizo con vocación. Nunca se tomó vacaciones y constantemente al pendiente de que un paciente la pueda necesitar, y debía estar para esa persona. Realizaba curaciones, inyectables a domicilio, atención a personas ancianas, a cualquier hora, incluso fuera del horario de trabajo y sin cobrar algún adicional, todo lo hacía por el sueldo que percibía desde la Municipalidad. Así mismo, recordó “con el doctor Amarilla hace 24 años iniciamos con la sala y nunca hubo ningún inconveniente, ni con él ni con quienes lo sucedieron. Pasaron muchos gobiernos, también, y nunca ocurrieron dificultades. Hoy en la dirección está a cargo la Dra. Gacio, pero tampoco hubo ningún comunicado ni llamado, ni solidaridad desde el Ministerio. Y en la sala el único comunicado es un cartelito en la puerta que dice que desde 8:30 a 12:30hs nada más es la atención, o sea que ya habría que enfermarse solamente en ese horario, por la tarde o por la noche no puede enfermarse nadie, ni puede tener una emergencia".

Cartel colocado por el Municipio de Mantilla en la puerta de la Sala de Primeros Auxilios.

Para finalizar y con un tono entrecortado por la congoja que le provoca toda esta situación, Olga afirmaba que le falte muy poco para pensar en jubilarse, todavía se siente capacitada, “tengo conocimiento de toda la comunidad y sé de la problemática de cada paciente, qué problema de salud tiene y cómo actuar ante una emergencia, por ejemplo, con un paciente que esté con un dolor de estómago, un ataque asmático, brindarles los primeros auxilios, porque son veinticuatro años al lado de ellos. Hoy no solo siento que me perjudican en lo personal y económico, sino que también los dejan, en cierta manera desamparados” cerró.

Ojalá la Intendencia o quién responda por la Sala de Primeros Auxilios de la Colonia 2 de Abril, Mantilla, puedan dar una solución.